La palabra procede del griego, y está compuesta de φίλος ("filos", que en griego sifnifica "amante de" o "amigo de", se suele confundir con amor que en griego sería "filia" o especialidad "ειδικότητα") y σοφία ("Pensamiento", Sabiduría, conocimiento, saber): φιλοσοφία (Amante de la Sabiduría).
Para los primeros filósofos de la Grecia antigua, la sabiduría era una virtud, una búsqueda del conocimiento genuino, y una superación de las opiniones falsas. El propio ejercicio de la filosofía empezó tomando trascendencia como una actividad intelectual y crítica, orientada a reflexionar sobre las causas naturales que explicarían los distintos fenómenos que se producen en la realidad sustituyendo a los mitos, en un paso del mito al logos (el razonamiento), de la explicaciones ocultas o sobrenaturales - frecuentemente atribuidas al capricho de los dioses -, a las explicaciones racionales, donde las causas pueden ser observadas o deducidas lógica, objetiva, neutral y metódicamente dentro de la propia realidad. (Continuar leyendo)